El Granate acumula dos alegrías en fila y se acomoda en la lucha por la clasificación a la Sudamericana. Pero el lunes deberá volver a salir al campo. Será con el Calamar en la Fortaleza de Cabrero y Guidi.
Lanús sumó su primer triunfo como visitante en la Liga Profesional al vencer a Talleres, en Córdoba, en el marco de la fecha 22 de la Liga Profesional, y de esa manera no sólo continúa su escape del fondo de la tabla de posiciones sino que queda a tiro de la clasificación a la Copa Sudamericana del próximo año, con la espina todavía clavada de haber quedado eliminado en la vigente, en semifinales.
El que ponderó el rendimiento en la provincia mediterránea fue el entrenador Ricardo Zielinski, que comentó: "En la primera parte estuvimos incómodos, pero lo supimos corregir en el entretiempo. Talleres es un buen equipo, lo manejamos bien y aprovechamos las oportunidades del partido. En líneas generales, creo que el equipo hizo un partido inteligente y se reflejó en el resultado".
El halago se construyó revirtiendo el marcador, pues el local abrió la cuenta y el Granate cambió la dinámica a partir de las anotaciones de Marcelino Moreno en la etapa inicial y de Ezequiel Muñoz, con un cabezazo, al promediar el complemento.
Fue un desempeño que tuvo puntales vitales en las individualidades, especialmente el mediocampista mendocino, y por eso se concretó una victoria que replica la firmada unos días atrás cuando se despachó a Boca en la Fortaleza de Cabrero y Guidi.
"Hicimos buenas conexiones en el primer tiempo, pero en la segunda parte nos quedamos cortos. Tenemos un problema general de que los jugadores están cansados por tener competencias internacionales. No dan más", comentó, en medio del trajín de partidos, que para colmo certificará uno más en el corto plazo, dado que el lunes tocará recibir a Platense, ya inmiscuido en el tramo final del torneo.
En ese sentido, el DT remarcó: "Nos enfocamos en este campeonato. Los jugadores están haciendo un esfuerzo enorme en lo físico. Nos estamos manejando como podemos".
La referencia es para algunos cambios obligados, a sabiendas de las limitaciones de la plantilla, con averiados al por mayor y recién algunos que empiezan a volver. Por ejemplo, el Ruso sostuvo: "Hay que poner a (Juan José) Cáceres de ocho, a (Leandro) Jara de cinco. En la copa internacional pasó lo mismo, debutaron chicos, ha sido duro el camino hasta acá".
Y añadió: "Gracias a Dios pudimos hacer una buena copa internacional, inclusive pudimos haber jugado la final pero ahora toca pensar en lo local".
Y lo que viene en lo doméstico es el Calamar, un rival directo en la lucha por acceder a la próxima Sudamericana. Será en casa y con la obligación de extender la racha positiva post eliminación. El trámite no se presenta sencillo, dado que el rival está en alza, más allá que viene de empatar sin goles con Deportivo Riestra en Vicente López.
En la tabla anual, por caso, Lanús ostenta 49 puntos, a cuatro de Unión, el último que está con pasaje directo a zona de copas, y Platense tiene 47. Entonces, una sorpresa en casa generaría un cimbronazo y hay que evitarlo.