El Granate mira de reojo el duelo con Instituto, vital para las aspiraciones de arribar a la Sudamericana, mientras los directivos avanzan en la unificación para diseñar el ciclo político entre 2025 y 2027.
Mientras el plantel de Lanús se enfoca en los últimos dos compromisos de la Liga Profesional, en los que pondrá en juego su clasificación a la próxima edición de la Copa Sudamericana, el movimiento de las placas tectónicas a nivel dirigencial es contundente, pues, cuando parecía que se iban a concretar elecciones después de 15 años, finalmente hubo acuerdo y el se prevé que el próximo presidente para el ciclo 2025-2027 sea Nicolás Russo, acompañado en binomio con Alejandro Marón.
A contrarreloj, y después de varias idas y vueltas, los principales dirigentes del Granate arribaron a un pacto que los mostrará no sólo unificados sino que con la posibilidad de modificar el estatuto interno para ampliar la comisión directiva.
Toda la movilización se certificó en un puñado de horas, luego de relaciones tirantes entre los principales exponentes de la institución, que encaminaba el trayecto hacia un enfrentamiento entre las dos piezas más ganadoras de la historia.
Pero tanto Russo como Marón, además del resto del grupo dirigencial, aunaron esfuerzos, cambiaron la dinámica que se atravesaba y ahora se planifican los pasos a seguir, ya sabiendo que no habrá votación, algo que estaba pautado para el 15 de diciembre.
¿Cómo sigue el panorama? Según el acuerdo, la actual presidencia, en manos de Luis María Chebel, se extenderá por un mes más, hasta fines de enero, mientras se sostienen las asambleas extraordinarias que deriven en la ampliación de la comitiva, que pasaría de 27 a 37 miembros.
Esa reunión con los socios, que deberán avalar la premisa de modificación, se realizará a fin de mes, previo a las fiestas de fin de año, y ya después del receso sí encarar la habilitación de una nueva conducción, que tendrá al actual diputado provincial en la cúspide.
Y mientras esas cuestiones se definen, el fútbol sigue su curso, y los conducidos por Ricardo Zielinski piensan en Instituto, rival del sábado en la Fortaleza de Cabrero y Guidi, en un compromiso trascendental, ya que son contrincantes directos en la pelea por la plaza en el torneo continental.
Los números indican que el Grana ostenta 55 unidades y la Gloria 53, y ambos están en pos de arribar a ese último cupo internacional, hoy en manos de Defensa y Justicia, con 56, aunque es factible que se agreguen más, dependiendo quién salga campeón.
Después de ese choque restará el último capítulo, con Barracas Central, de visitante, con una particularidad, y es que el Guapo viene siendo anfitrión en la región, por lo que hay chances que Lanús vaya a domicilio en su propio terreno, algo que deberá definir la Asociación del Fútbol Argentino por seguridad.
En tal caso que no se dé curso, otra variable que se insinúa es ir hasta Parque Patricios, en la cancha de Huracán, o en el campo de Deportivo Riestra, en Pompeya, todo en la cercanía.