Había conejos, ovejas, gallinas y pollitos en condiciones de hacinamiento, encerrados, sin agua ni alimentos y sin control sanitario. El responsable de 61 años quedó imputado.
A raíz de una investigación por una denuncia de una organización proteccionista, agentes policiales y judiciales allanaron una vivienda en Berazategui y rescataron 66 animales entre conejos, ovejas, gallinas y pollitos, los cuales estaban a punto de ser faenados, mientras que imputaron al responsable, un hombre de 61 años, quien no pudo dar explicaciones al respecto por dicha posesión, como así tampoco tenía habilitación alguna, en tanto que los ejemplares estaban en condiciones de hacinamiento, encerrados y faltos de alimentos.
Se trata de un nuevo caso de maltrato animal en el distrito, luego de la aberrante noticia que circuló en las últimas semanas por la faena clandestina de caballos en El Pato y su carne, que después era vendida en las carnicerías como si fuese de vaca. En aquella oportunidad, detuvieron a ocho personas y secuestraron huesos, vísceras, carne y demás. Pero ahora, lejos de ser distinto el panorama, desbarataron otro criadero ilegal.
Todo comenzó cuando activistas de la Fundación Planeta Vivo radicaron la correspondiente denuncia policial en la Comisaría Primera de Berazategui, el pasado martes 19. Estos se habían enterado por vecinos del barrio que existía un sujeto que en su casa criaba todo tipo de animales con el fin de matarlos y venderlos. Así las cosas, el caso se elevó a las autoridades y finalmente allanaron dicha finca.
Bajo la orden de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFIyJ) número 1 y en trabajo conjunto con el gabinete de investigaciones de la seccional mencionada, los agentes se dirigieron a la calle 9 al 3200. Al llegar, identificaron al dueño del lugar, de 61 años, quien no tuvo más opción que dejar pasar a los efectivos. Rápidamente, vieron que lo denunciado era certero y mucho más grande de lo que creían.
Primero, se toparon con cuero de conejo tirado por el piso. Pero luego, al adentrarse, vieron que había 66 animales en condiciones de hacinamiento, sobre sus propias heces y en estado de desnutrición, sin agua ni comida. Eran 3 ovejas que estarían preñadas, 30 conejos, 28 gallinas, 5 pavos, pollitos y gallos, separados,todos muchos de ellos en jaulas y sin control sanitario alguno, como así tampoco habilitación para ir a la faena.
Los ejemplares fueron trasladados a hospitales veterinarios y, los que estaban en buen estado, fueron puestos a resguardo con los proteccionistas.
El hombre quedó imputado por infringir la Ley de Maltrato Animal y deberá presentarse ante la Justicia para saber cuál va a ser la sanción que le corresponderá. Es importante resaltar que este tipo de delitos son gravísimos y bien lo saben quienes fueron detenidos en un taller clandestino ubicado en El Pato en las últimas semanas por matar caballos para vender su carne: a dos de ellos le dictaron prisión preventiva.
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