El entrenador del Cervecero se mostró satisfecho con el desempeño de su equipo. Ahora deberá sostener este presente para soñar con un mejor pasar.
Quilmes logró un importante triunfo por 1 a 0 frente a Arsenal de Sarandí en un encuentro correspondiente a la Primera Nacional, y con ello, ratificó su buen momento tras un inicio de temporada complicado. El equipo dirigido por Sergio Rondina se quedó con los tres puntos en un partido que le permite seguir creciendo en la tabla de posiciones y dejar atrás los fantasmas de un arranque impensado en el certamen.
Tras el encuentro, el entrenador del Cervecero, se mostró satisfecho con el desempeño de su equipo. "El equipo lo hizo bien, buscó el segundo gol en todo momento. La verdad que estoy contento", aseguró el DT, destacando la actitud ofensiva de los jugadores, que no se conformaron con el 1 a 0 y siempre intentaron ampliar la diferencia.
En un análisis general del encuentro, Rondina expresó: "Fue un buen partido de todos. Estamos contentos de ganar de visitante, que en esta categoría no es fácil".
Uno de los momentos que generó cierto debate fue una jugada polémica en la que, según el Huevo, no fue penal para el Arse: "Fue una jugada rápida, no tenés VAR. Viéndola por televisión, pega en el hombro", comentó el entrenador, dejando en claro que, a su juicio, la jugada no fue sancionada correctamente.
"Lo podíamos haber definido antes", admitió, reconociendo que el Decano tuvo varias oportunidades para estirar la diferencia antes de lo que finalmente ocurrió. A pesar de ello, el entrenador no ocultó su satisfacción por el rendimiento del equipo y por el hecho de que se hayan quedado con los tres puntos en un campo siempre complicado como el del conjunto de Sarandí.
Con este triunfo, el elenco de la región sigue demostrando que ha dejado atrás los inconvenientes de su arranque en la Primera Nacional y que, bajo la conducción de Rondina, está en pleno ascenso. Sin embargo, aún la tarea difícil será sostener este presente para soñar con un mejor pasar.