Estaba fanatizado con los ómnibus, su interior, su andar, pero particularmente con las imágenes que hay dentro de ellos y con el abrir y cerrar de las puertas y tras ser invitado recorrió la cabecera quilmeña.
En un accionar que se repite todo el tiempo, trabajadores de la línea 85 de colectivos, conocidos como “La Banda de SAES”, pioneros en la utilización de pictogramas dentro de las unidades y reconocidos en el mundo entero, invitaron a un niño de 5 años que tiene autismo a recorrer la terminal de ómnibus y a “trabajar” con ellos, debido a su fanatismo con la señalización implementada por las autoridades.
Días después del decreto que obliga a todos los colectivos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) a implementar los pictogramas en las unidades que circulen por allí, noticia que generó mucha felicidad en el seno de los creadores, un pequeño llamado Liam cumplió su sueño y su caso se viralizó en las redes sociales. En sintonía, vecinos quilmeños y de los alrededores dejaron sus mensajes y destacaron a quienes organizaron la movida.
Se trata de un niño con Trastorno del Espectro Autista (TEA), quien estaba fanatizado con los ómnibus, su interior, su andar, pero particularmente con las imágenes que hay dentro de ellos y con el abrir y cerrar de las puertas. Es por ello que su madre se contactó por una plataforma virtual con La Banda de SAES, les explicó la historia y ellos, sin dudarlo, los invitaron a conocer la terminal y las unidades.
Así las cosas, Liam y su mamá fueron y compartieron una jornada maravillosa, que se trasluce en el rostro sonriente del pequeño y en las múltiples fotos que se sacaron. Además, lo dejaron sentarse en el asiento del conductor, utilizar la botonera y lo filmaron sorprendido por todo lo que podía hacer desde la cabina del chofer. Fue uno de los días más felices de su vida y las autoridades indicaron que “nos llena el alma saber que con un pequeño gesto podemos hacer una gran diferencia".
También lo invitaron a las oficinas, donde se ven los recorridos en las computadoras y a las fosas en las cuales puede observar a los colectivos desde abajo y su parte mecánica.
Lo cierto es que no es la primera vez que los allegados a la línea 85 -a cargo de Sociedad Anónima Expreso Sudoeste (SAES) hacen algo así y llenan de orgullo a toda la comunidad. De hecho, el proyecto que lanzaron hace algunos años atrás para que todos los pasajeros, sin depender de sus trastornos o afecciones, pudieran viajar con normalidad, recorrió el mundo entero.
Sin ir más lejos, el esquema fue declarado de interés por la Cámara de Diputados bonaerense y por el Concejo Deliberante de Quilmes y sueñan con ser el país con el 100 por ciento de la implementación de la señalización pictográfica.
Por último, los padres de Liam enviaron un sentido mensaje a La Banda de SAES y dijeron que estaban muy agradecidos por “este día inolvidable” que les hicieron pasar y que no se lo podrán borrar de la memoria al pequeño, que se llevó un mini ómnibus de cartón para jugar en su vivienda y así seguir estando en contacto con ellos.