Quilmeño
3'
Familiares de Maia Spinelli, de 17 años, cuestionaron que Valentín Perrone, quien guiaba el vehículo en el que viajaba y chocó, reciba prisión domiciliaria. Su madre, Mariana, apuntó: "Mi hija recibió una condena de muerte para siempre".
Familiares de Maia Spinelli, la joven de 17 años que murió en un siniestro vial en Florencio Varela, mostraron todo su descontento tras conocer el fallo de la Justicia que le otorga la prisión domiciliaria al conductor del rodado en el cual ella viajaba, que al momento del choque iba alcoholizado, y sostuvieron que la decisión radica en que el acusado es “de buena familia” y que las autoridades no creen que se vaya a dar a la fuga.
Se trata de un caso lamentable que se suma a la lista interminable de muertes por alcohol al volante, en esta oportunidad, tras la salida de un local bailable. Lo cierto es que por el hecho quedó imputado Valentín Perrone, de 18 años, que fue quien provocó el desastre en el cual hubo una víctima fatal y cuatro heridos de distinta consideración, aunque fuera de peligro. La madre de la fallecida, Mariana, conversó con los medios y mostró su disgusto por la noticia conocida del beneficio al homicida.
Si bien había trascendido que le habían negado la domiciliaria, la realidad es que fue una fake news que se viralizó. Pero lo cierto es que el conductor del Ford Ka en el que iba Spinelli sentada en el asiento del acompañante, esperará la respectiva cita judicial desde su vivienda, con una tobillera electrónica y reportando su ubicación constantemente a los agentes. Esto, por obvias razones, no cayó nada bien en el círculo de la damnificada, que se manifestó al respecto y pidió un cambio urgente.
Según el testimonio de Mariana, Perrone pertenece a una familia adinerada y con muchos contactos, que desde un primer momento abogó por su libertad inmediata. La insistencia de la defensa particular del joven hizo que la Sala I de Garantías y Apelaciones del Departamento Judicial de Quilmes haga lo propio y así salga favorecido. “Mi hija también era de una buena familia, excelente persona, estudiaba, pero recibió una condena de muerte, para siempre”, soltó la mujer enardecida.
El siniestro se produjo el pasado 13 de julio, en la intersección de la Avenida Eva Perón y 12 de Octubre, cuando Perrone chocó contra un auto, perdió el control del suyo y se subió a la vereda. Maia agonizó dos días, hasta que los profesionales médicos del Hospital Mi Pueblo certificaron la muerte cerebral. Fue enterrada dos días después en el Cementerio de Florencio Varela y, a pesar de la presión de sus allegados, parece estar marcado el caso por la impunidad del asesino al volante.
La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 7 lleva adelante la causa, caratulada como “Homicidio con dolo eventual en concurso ideal con lesiones”. La madre de Spinelli sólo pide que “se cumpla la ley” y que el culpable reciba la sanción que le corresponde. En tanto, espera que no se fugue y que la investigación se cierre cuanto antes. Amigos de la víctima también se manifestaron a través de redes sociales y no coinciden con la decisión de las autoridades judiciales.