El barrio varelense de San Francisco Oeste está a merced de los delincuentes que roban en las penumbras posibilitadas por las luminarias apagadas.
Al respecto, los vecinos totalmente cansados denunciaron que el problema “viene desde principios de año y las autoridades no hacen nada”.
Las deficiencias en el alumbrado que desemboca en los robos se da en la calle 1434, entre Avenida Eva Perón y 1423.
En diálogo con El Quilmeño, José, vecino de la zona, indicó que “a partir de enero, las columnas de alumbrado público dejaron de funcionar correctamente. En un primer momento vinieron a arreglarlas y apenas pasaron días y se volvieron a echar a perder”.
Obviamente que la oscuridad de la zona es la primera consecuencia del desperfecto del alumbrado público. “Es una verdadera boca de lobo, no se ve nada. Ahora en invierno se acentúa porque oscurece desde muy temprano”, comentó.
Esta situación genera otra aún peor que es la proliferación de robos a los miembros de la comunidad y, que hasta ahora, no han sufrido graves ataques de violencia.
José, con uno tono temeroso, describió que los hechos delictivos son protagonizados por “ladrones que se amparan en la oscuridad de esas tres cuadras que parecen no terminar más”.
Cualquier persona puede ser blanco de los ataques, sostuvo , al tiempo que precisó que “entran a robar tanto en los comercios del lugar como a los peatones”.
<Con respeto a los comerciantes, comentó que “hay una verdulera que siempre le entran a robar y ya está cansada. Le sacan lo poco que recaudó en el día. Lo mismo sucede en la carnicería y en otros locales que están ubicados en 1434”, aportó.
Asimismo, declaró que asaltan a las personas que van o vuelven de trabajar. “Los obligan a que les den la mochila, el celular o la billetera”, relató. Los momentos donde se producen los delitos son “a la madrugada y después de las 18, que es cuando anochece más temprano en esta época”.