El dueño del accesorio fue a reclamarle su devolución a quien vivía en el barrio. Pero como respuesta, junto a otros cómplices, lo golpeó y lo apuñaló. Al investigar el caso, la policía comprobó que tenía antecedentes delictivos.
La Justicia está solicitando 22 años de prisión para un sujeto acusado de querer asesinar a golpes y puñaladas a un hombre a raíz de una pelea por una gorra en Bernal Oeste, además de cometer varios robos a mano armada, sumado a que tiene otros antecedentes similares e intentó ejecutar a otra víctima de la misma manera, por lo que esperan que puedan encarcelarlo, a pesar del pedido de absolución que mantiene su defensa.
Se trata de un criminal que causó muchísimo daño y actuó sin piedad contra vecinos quilmeños, a los que no le alcanzó con robarles, sino que también quiso matarlos. Sin embargo, los damnificados lo denunciaron y, a pesar de que ya pasaron varios años, parece llegar a su fin su impunidad. Cabe destacar que dejó serias secuelas en aquellas personas a las cuales agredió y esperan con ansias su sanción.
Todo comenzó en 2019, el 11 de agosto, cuando un joven fue a recuperar una gorra que le habían robado a un amigo suyo. La víctima del ilícito había perdido sus pertenencias en manos de alguien a quien conocía del barrio. Es por ello que el chico se dirigió y exigió que le devolviera dicha prenda, pero la respuesta de Juan Carlos Escobar, el acusado, fue la peor que se podría haber imaginado. Allí comenzó el calvario que duró por algunos minutos y, sin exagerar, lo dejó al borde de la muerte. Sucedió en la intersección de las calles 192 entre Agustín Pedemonte y Comandante Franco.
El agresor lo golpeó en conjunto con otros cómplices, lo apuñaló y se dio a la fuga. Por suerte, el damnificado fue atendido de urgencia, trasladado a un centro de atención y le salvaron la vida. Cuando radicó la denuncia, lo identificó y los agentes investigadores de la seccional correspondiente descubrieron que tenía antecedentes gravísimos por delincuencia a mano armada y que participaba con frecuencia de circuitos delictivos en la zona y alrededores, también en patota.
Es por ello que más de cinco años después, la fiscal del caso, María de los Angeles Attarian Mena, pide 22 años de prisión para Escobar, por el delito de “Tentativa de homicidio agravado criminis causa y de robos agravados por el uso de armas”. El juez a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°1 del Departamento Judicial de Quilmes tendrá en sus manos la decisión de avalar o negar el requerimiento de la letrada.
Por otro lado, la defensa particular del acusado trabaja para su absolución y la noticia será dada a conocer en la semana entrante.
Es importante resaltar que hay otro episodio similar, en el cual otro hombre fue a confrontar con él por un ilícito y sufrió las mismas consecuencias. Lo golpearon entre varios, no lo dejaron escapar y tomaron la escalofriante decisión de ejecutarlo, aunque milagrosamente no pudieron hacerlo. También fue atendido y se salvó de milagro.
Es por ello que, con el fin de llevar tranquilidad al barrio y dar un claro aviso a los delincuentes, esperan su pronta condena.