El elenco de Berazategui acumula caídas y marcha en la medianía del registro de la Liga Nacional femenina. El próximo escollo será de local con Rocamora, el domingo.
Derrota ajustada para Deportivo Berazategui, que perdió por 60 a 53 con El Talar, en condición de visitante, en el marco de una nueva fecha de la temporada de la Liga Nacional femenina, evidenciando un rendimiento irregular, en el que no se halla la fórmula para terminar de dar el salto hacia la pelea por la vanguardia de la tabla de posiciones.
Los números indican que el club de la región ostenta 10 puntos, con un saldo de tres alegrías y cuatro tropezones, dos de ellos en las últimas presentaciones, dado que previa a este tanteador esquivo se dio la caída con Ferro, en ese caso de local, siendo ese contrincante el único que supo festejar en todas las labores y se erige como el gran candidato a dar la vuelta olímpica.
¿Qué ocurrió en el compromiso reciente? Hubo dos piezas de un notable rendimiento, con anotación permanente y una efectividad vital, aunque el resto no acompañó y por eso terminó el cotejo en derrota.
Se trata de las performances de Sofía Acevedo, con 16 unidades, mientras Johanna Puchetti aportó 15. De hecho, ambas fueron las máximas artilleras, teniendo recién abajo una de El Talar con 14, la experimentada Julieta Ale, aunque en el rival fueron varias las que mantuvieron cierta cifra que posibilitó sellar el halago.
¿Cómo sigue el calendario? El domingo tocará recibir a Rocamora de Entre Ríos, con la expectativa de ganar, festejar y emparejar el registro para quedar más arriba en el escalafón.
El compromiso está pautado para sostenerse en la cancha de Temperley, donde Bera a veces hace de anfitrión, y la premisa es ganar para poder sobrepasarlo, dado que actualmente están con la misma tanda, más allá que el rival primero tendrá en el horizonte el cotejo con Lanús, que podría elevarlo o bajarlo en las estadísticas.
En la región saben de la importancia de un halago, especialmente para cortar una racha negativa que complicó el transito en una campaña que había abierto con intensidad y un saldo positivo, ese que no estuvo durante todo el torneo pasado, cuando las conducidas por Gonzalo Gómez siempre se posaron en el fondo.