Vecinos exigen traslado de planta de VTV de Quilmes

Verificar un auto en la VTV de Quilmes se convirtió desde hace varios meses en un verdadero calvario tanto para los automovilistas como para los vecinos de la zona, que aseguraron que las colas para ser atendidos se inician a la medianoche o a las 3 de la mañana y que ocasionan ruidos molestos, suciedad y que en algunos casos existe un diálogo hostil entre los conductores y los habitantes de la cuadra que están pidiendo el traslado de la planta. En los últimos tres meses, según informaron desde la VTV de Quilmes, ubicada en la avenida 12 de Octubre al 2400, las colas comienzan en esa calle y terminan casi en Rodolfo López y los 300 autos por día llegan a partir de la madrugada y las demoras son de 4 o 5 horas. Además aclararon que los conos, las señalizaciones y las pinturas amarillas que hicieron en el cordón para delimitar no son respetados. Asimismo, los vecinos presentaron sus quejas a la verificadora y a la dirección de tránsito porque sostienen que los automovilistas estacionan en lugares no permitidos, como las puertas de garaje de casas particulares, ensucian las veredas con sus desechos, se sientan en las puertas de las casa de lo vecinos y dejan botellas, restos de comidas, papeles, latas de cerveza y hasta los pañales sucios de los bebes que traen algunos. “Sinceramente ya estamos hartos de esta verificadora, queremos que se termine lo más pronto posible porque años anteriores no tuvimos que padecer esta locura, pero ahora como hay más controles de tránsito vienen todos de última a verificar y nos perjudican, porque cada vecino tiene que andar pidiendo por favor que muevan los autos porque a veces no tenemos lugar para entrar a casa, y cuando tenemos que sacar el auto del garaje nos encontramos que los tipos estacionan en la puerta. Que las saquen ya”, dijo una vecina muy molesta por el caos vehicular que se extiende hasta siete cuadras después de la planta controladora.
“Una pesadilla”
En tanto, otra vecina de la zona, detalló que algunos automovilistas se dirigen de mal modo hacia los vecinos e incluso que se han tomado a golpes de puño días atrás por no llegar a un acuerdo. Una señora comerciante, de hecho se dirigió hasta la verificadora para increpar a sus empleados e intentó romper los vidrios porque está cansada de los ruidos que le generan molestias para dormir. “Ya no se puede convivir con esta pesadilla, uno les pide de buenas que muevan el auto porque necesitamos pasar y ellos se enojan y te contestan mal. Es más, yo ya no puedo recibir gente en mi casa porque no hay lugar donde estacionar. Algunos son impudentes y ponen música a las 2 de la mañana y se tiran en la calle como si fuese una playa. En mi opinión la verificadora de Quilmes no tiene que estar en 12 de Octubre, porque esto es un barrio de gente trabajadora y tranquila y la plata tiene que estar en un lugar más alejado o cerca de la autopista o en el medio del campo. No piensan que nosotros tenemos que ir a trabajar que queremos estar en paz y todos los días a todas horas hay ruido y basura porque nos tiran basura en la puerta. Es una mugre. Hay algunos que tienen respeto y corren sus autos cuando se lo pedimos pero hay gente que casi nos pega, nos escupe, un desastre”, sostuvo otra joven vecina, madre de tres. En tanto, los automovilistas y los comerciantes dieron sus puntos de vista y explicaron que las colas se hacen interminables y que debido a que hay más controles de tránsito, en los últimos meses se acrecentó el caos en la VTV, y a pesar de que trabajan organizadamente y de haber extendido el horario de 6 a 19 a los vecinos les resulta muy incómodo por sus propios autos. Según una estadística de la VTV el año pasado los controles se hacían en una hora y no venían tanta cantidad de autos ni a la de Quilmes ni a la de Bernal, pero desde principios de diciembre la situación se descontroló y la gente empezó a estacionar mal para la cola. “El año pasado verifiqué en San Francisco Solano y la verdad que hicieron muy rápido, y este año me tuve que aguantar más de 6 horas de cola y de morirme de calor. Los vecinos están un poco enojados porque dicen que les sacamos espacio, yo por mi parte no molesto a nadie y trato de no pedir nada ni de portarme mal, porque los vecinos tampoco tienen la culpa”, sostuvo un joven automovilista. Según fuentes de la VTV, los controles continuarán hasta marzo, y esperan que desde la dirección de tránsito se organice de mejor manera el modo de verificar así no se ocasionan molestias ni malos entendidos.