Quilmeño |
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El martes recibieron una notificación de la Suprema Corte y el supuesto dueño, junto con la Policía, intentó tirar abajo la sede, utilizada a diario -desde hace más de 30 años- por cientos de personas e instituciones para actividades sociales y deportivas.
El Club Social y Deportivo Zapiola, una institución barrial que funciona hace más de 30 años en Bernal Oeste, corre riesgo de ser desalojado por un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires, motivo por el cual un centenar de vecinos de la zona se movilizaron y anunciaron que van a resistir la medida para defender la sede, ubicada en avenida Pedemonte entre 191 y 192.
El martes recibieron la cédula de notificación judicial de desalojo y el supuesto dueño, junto con la Policía, intentaron demoler las instalaciones con una topadora, pero no pudieron lograrlo ante la reacción de los vecinos. Ese mismo día, se llevó a cabo una asamblea en la que anunciaron un plan de lucha.
La secretaria de la entidad, Norma Luna, explicó que el Club Zapiola “cientos de personas utilizan a diario el predio para actividades deportivas y dos escuelas estatales de Bernal envían a los alumnos para realizar las clases de educación física”.
“Acá se dictan clases de softbol a chicos y se está organizando de nuevo el fútbol infantil. Los fines de semana se juega un torneo de verano. Además, los vecinos vienen a caminar. Otras instituciones del barrio, como la Iglesia, nos pide las instalaciones para festejos del día del niño, por ejemplo. Este club está lleno de vida, no lo pueden cerrar”, indicó apesadumbrada.
Asimismo, Luna detalló que “estas tierras eran un basural inundable que los vecinos se encargaron de rellenar y limpiar”. “Quien dice ser el dueño nunca se ocupó ni le importaron estas tierras”, enfatizó.
Situación legal
De acuerdo al relato de la secretaria del Club, el terreno “fue cedido hace 40 años por el doctor Caffarena para que se construya una entidad barrial”. Sin embargo, reconoce que el problema fue haberlo hecho “de palabra”.
“Nunca se avanzó en el tema legal, pese a que en un momento hasta tuvimos el reconocimiento del Municipio de Quilmes”, reveló y, luego, agregó: “Tenemos los registros de las reuniones de Comisión Directiva y desde hace varios años venimos pagando el agua, el único impuesto que nos llegaba”.
En ese marco, este jueves a las 18 se llevará a cabo una nueva asamblea con los vecinos, pero esta vez contarán con el asesoramiento de un letrado que los representará en su reclamo legal.