En la actualidad es imprescindible que todos y en particular aquellos
que han sufrido algún episodio vascular llámese infarto de miocardio,
angina de pecho o accidente cerebrovascular; tengan una buena educación
sobre los grandes objetivos de la salud pública.
“Dentro de los objetivos esta el colesterol, su acción en el organismo, su prevención y su tratamiento” comenta la Doctora. María Rostan, cardióloga y especialista en lípidos del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA).
Antes que nada es importante responder una pregunta básica: ¿Qué es el colesterol? El colesterol es un lípido, es decir, una grasa, de la familia de los esteroles. Está presente en todas las células humanas vivas es exclusivamente de origen animal.
¿De dónde proviene el colesterol? El colesterol tiene dos orígenes importantes: Endógeno: es el que se produce en nuestro propio organismo, y la mayor parte de este colesterol es producido por el hígado. Sin embargo, muchas otras células pueden sintetizar colesterol (por ejemplo: células intestinales).
Exógeno: es el que proviene de los alimentos. Sólo los alimentos de origen animal contienen colesterol. En el intestino se absorbe una parte del colesterol junto con otras grasas, los triglicéridos en particular.
Cuando el colesterol se asocia a proteínas y a triglicéridos forman partículas llamadas colesterol-HDL (lipoproteína de alta densidad) y colesterol- LDL (lipoproteína de baja densidad), que son el colesterol bueno y malo respectivamente.
Los niveles de colesterol en sangre son: Colesterol total: Deseable: 240 mg/dl Colesterol LDL: Deseable: 160 mg/dl Colesterol HDL: Deseable: 45 mg/dl Alto riesgo: El colesterol es otro enemigo silencioso de la salud.
Tips: El tratamiento para el colesterol es, al igual que el tratamiento para la hipertensión arterial, para toda la vida y debe continuarse de manera ininterrumpida, además de permanente control médico. Ambas son enfermedades de las denominadas silenciosas, es decir asintomáticas y cuando se manifiestan es porque ya están en estado avanzado. ¿Remedios o dieta? “El medicamento no sustituye a la dieta”. En aquellas personas que han tenido una enfermedad cardiovascular, infarto de miocardio, angina de pecho, accidente cerebrovascular etc. se indica tratamiento farmacológico independientemente que los valores de colesterol no estén elevados. Contra el “malo” El tratamiento con drogas hipolipemiantes (para bajar el colesterol) se indica en aquellos pacientes con elevaciones significativas del colesterol malo como complemento de la dieta. Pero los médicos no se cansan de repetir que en el tratamiento contra el colesterol no hay resultados farmacológicos sin una dieta estricta.