Creado casi al mismo tiempo en Italia y España, se juega con barajas inglesas y tuvo gran influencia en los juegos de naipes argentinos. Su objetivo consiste en descartar cartas de la mano y exponerlas en conjunto a fin de alcanzar 1.500 puntos antes que los contrarios.

El pinacle o pináculo es un juego de naipes por combinaciones que surgió y se desarrolló simultáneamente en España e Italia, donde se conoce como pinaccolo, en la década de 1940. Se juega con barajas inglesas, con 108 naipes. A partir de este juego se gestaron algunas de las ideas que poco después dieron lugar, por ejemplo en la Argentina, a juegos como la canasta, que propone premios por combinaciones de gran número de cartas; los doces como comodines; el valor de las cartas, entre otras cosas.

El objetivo consiste en descartarse de las cartas de la mano para exponerlas sobre la mesa en combinaciones con un mínimo de tres cartas, a fin de alcanzar, antes que los contrarios, el mínimo de 1.500 puntos necesarios para ganar la partida, en uno o varios juegos parciales. El pinacle es un juego para cuatro jugadores, que se enfrentan entre sí formando dos parejas. Los componentes de la pareja se sientan en la mesa de juego enfrentados e intercalados con los jugadores de la pareja contraria. Estas parejas pueden estar convenidas de antemano o pueden determinarse por sorteo.

Para jugar al pinacle se utilizan dos barajas inglesas de 52 cartas más 2 comodines o jokers por baraja, es decir que se juega con un total de 108 cartas. Algunos jugadores sólo añaden un comodín joker por baraja, de forma que sólo utilizan 106 cartas. En el juego del pinacle, las cartas siguen el orden usual de la baraja inglesa, con el as como carta superior. El orden de las cartas es, de mayor a menor: as, rey, dama, jota, diez, nueve, ocho, siete, seis, cinco, cuatro y tres. Este orden se usa para formar secuencias o grupos de cartas del mismo palo que, para ser válidas, deben estar compuestas por cartas consecutivas.

Los ases y los treces constituyen los extremos superiores o inferiores de una escalera, de modo que no puede colocarse ninguna carta más luego de ellos. Nunca son cartas intermedias. Los ases sólo pueden ponerse en la secuencia, reina-rey-as, mientras que el tres sólo va en la secuencia tres-cuatro-cinco.

Los ocho doces de las dos barajas se utilizan como comodines con las mismas condiciones que los comodines-jokers. Sin embargo, existen algunas combinaciones que tienen valores diferentes según el tipo de comodín utilizado. Los comodines son cartas que se utilizan para suplir o representar cualquier otra carta de una combinación.

Existen dos tipos de comodines, los jokers y los ocho doces rojos y negros de las dos barajas. Ambos con idénticas funciones. El valor de las cartas es positivo, cuando forman parte de una combinación expuesta sobre la mesa, y negativo cuando están en la mano, aunque formen parte de una combinación válida. Cada comodín joker vale 30 puntos; los ases y los doces, 15 puntos cada uno; las cartas del rey al ocho, 10 puntos cada una, y el resto de cartas, es decir, del siete al tres, 5 puntos cada una.i