Con el fin de supervisar la última etapa de los trabajos, el
director Ejecutivo de PAMI, Carlos Regazzoni, junto al intendente Fernando Gray y miembros de su gabinete, recorrieron las instalaciones, que contará con una capacidad para albergar a 150 pacientes.
La construcción del hospital fue
financiada con fondos del PAMI y las obras se reactivaron a partir del pasado mes de febrero luego de que habían quedado paralizadas en 2015.
El establecimiento sanitario tendrá 150 plazas -ocho puestos para terapia intensiva, 12 para terapia intermedia, 112 para cuidados básicos y obstétricos y 18 para neonatología- y estará orientado al segundo nivel de atención, con internación, diagnóstico y tratamientos ambulatorios.
Contará con seis quirófanos, 18 consultorios y dos salas de tratamiento, una sala de emergencia, 22 consultorios externos y salas de pediatría y obstetricia. El sector de imágenes estará integrado con tomógrafo, mamógrafo, salas de rayos y de ecografía y endoscopía.
Además de los servicios de salud, el centro de alta complejidad tendrá tres aulas de escuela para enfermería.
Durante la visita, Regazzoni y autoridades dialogaron con médicos y enfermeros que a partir de noviembre próximo comenzarán a prestar servicios en los consultorios externos.
"Esta es la
inversión más importante en materia de salud que se ha efectuado en la historia de nuestro distrito",expresó el alcalde, a la vez que celebró que la obra
iniciada en 2011 "esté llegando a su último tramo".