Esta república independiente está enclavada en la zona noble de Montevideo, dentro de una gran casa que está flanqueada por un jardín en el que se asientan carteles con nombres de calles, cañones y estatuas. Los miércoles por la noche y los sábados a mediodía, sus ciudadanos se reúnen entorno a una mesa y comen, beben vino, cantan, hacen teatro o debaten, aunque eso sí, nunca de política, religión o deporte, destaca su presidente, Bartolomé Grillo.
Por sus instalaciones pasaron a lo largo de la historia personajes como el escritor Rubén Darío, el músico italiano Arturo Toscanini o el militar y político italiano Giuseppe Garibaldi, quienes asistieron a sus reuniones, a las que sus miembros conocen como 'tenidas'.
Esta asociación se fundó en 1878, dentro de una zona de la ciudad cercana a un antiguo vertedero y a un pesquero al que acudían sus primeros ciudadanos 'en tranvía de caballos', apunta el vicepresidente de Parva Domus, Rodolfo Mauri.
Su objetivo fue crear un espacio en el que debatir libremente y 'pasar buenos ratos entre amigos', algo que se ha mantenido hasta la actualidad, incide. A las puertas de Parva Domus, hoy se encuentran dos pilas que 'contienen las aguas del río Leteo', aquel que en la mitología griega que se encontraba en el reino de Hades, y del cual quien bebía su agua se olvidaba de su vida terrenal.
Sus miembros mojan sus dedos en estas ánforas al entrar para olvidarse simbólicamente de las preocupaciones de la vida real y sumergirse en la atmósfera de esta asociación, en la que el buen humor, la solidaridad, la amistad y la tolerancia deben primar, afirma su presidente.
Parva Domus cuenta con su propia bandera, sus estatutos, sus elecciones, su himno e incluso su divisa ficticia, esta última formada por billetes como el inexistente de 499 pesos uruguayos.
Una vez al año, el 25 de agosto, sus ciudadanos desfilan disfrazados por las calles de la República Vecina, como llaman a Uruguay, para celebrar su independencia y conmemorar el aniversario del primer izado de su estandarte. Actualmente, son cerca de 200 hombres -las mujeres tienen prohibida su filiación- los que forman Parva Domus.